Tiempo extra

No tienes idea de cuánto he evitado escribir sobre ti, sobre el hecho de...

No sabes cuantas veces he frenado mis manos, porque yo soy así, ya sabes, freno las cosas. Tengo siempre bajo la manga un punto de retiro, una tarjeta roja.

Me sorprende la escena que no has dejado ir, cuando yo debí hablar y explicarte que no jugaba contigo, pero decidí dejar que conduzcas a ridiculizarme.

Justo ahora que me decido al orden, vienes tú a decirme que te has dado cuenta de que los ciclos empiezan apenas donde terminan, dejándome en shock de qué llave usar para "alguna vez"... 
a mí, 
que se supone que siempre tengo bajo la manga un punto de retiro, el que usé  al mismo tiempo que sacaste tu tarjeta roja

y ahora
hasta el campo

está cerrado.