Replaneamos

Desplaneamos los días
y sigo deseando que estes aquí porque es Martes
aunque no sea Miércoles, ni Jueves, ni Sábado en la madrugada 
(día tan corto, día tan largo)

Desplaneé tu soledad
Desplaneaste mis cantos
Desplaneamos desencontrarnos y sonreírnos si llegásemos a vernos.
Desplaneé mi fin de semana largo contigo, celebrando el cumpleaños de Simón de cabeza en el hotel

Desplaneaste dos semanas a mi lado por pensar en un “no sé qué hacer”
Planeaste quedarte, planeaste irte
Planeé quererte, desplaneé conseguirte
eterno
a mi lado.

Nos desplaneamos los corazones, los espacios
Desplaneamos la fe
Planeé un alquiler, planeaste mis años y
después de una década
desplaneamos, amor, y planeamos
un pronto
un abrazo que nos deslice la carne
y nos quiebre los huesos y le devuelva la sangre
a estas venas
que desplaneó extrañarte y le salió al revés.

A veces llegas tarde, lo sé por certeza
por las cuentas
      la carga
      la ducha
      la cena…
Y mantengo doblado 
para el despiste el periódico
para la nostalgia, tu franela.

Te desplaneé el plan, cielo, me desplaneaste ver las estrellas en pretérito
pero es Martes y nos toca –en el amor que sentimos- aunque hemos desplaneado los días
porque no son las 6 de la tarde del Sábado, ni el ojo de Thor, ni lunes, ni tú con tus pantalones feos sentado en aquel café a mi lado
aunque sean estos los días que 
te sabías sin mí
que me sabía sin ti
y sin poder hacer ya nada para desplanearnos.