Linde


Intensivo de abrazos como incentivo de vida,
justo al borde de mi herida por las decisiones de voluntades correctas e inentendibles,
justo al lado de mi propio silencio, dejando que mi voz busque a solas una casa en la nada.
Cerrando los ojos en todos los arriendos en que no consolidamos amarnos,
aspirando el polvo estelar de tus ojos,
varada en los lazos desunidos,
rehaciéndome la vida.

Un trago de pecado que saboreo en tu recuerdo,
antes de dejarlo bajar por la nostalgia,
antes de releerme en terapia,
antes de definirme en las letras de papá,
antes de querer decirte todo lo que nos creó el pasado y desconocíamos.

Un STOP en el tiempo por la vida que no te di,
un recodo en los momentos traicionados,
un camino en mi pecho que te respira en retrospectiva,
un poco más de resignación
rehaciéndome la vida.

Todo lo roto
todas las palabras
todo lo que en siempre... nos definimos

Toda la voz
todo el dolor
todo lo que no supimos decir
que no íbamos a hacerlo, que no íbamos a luchar, que no apretaría el gatillo, que besarías mi historia
y
todo lo que me queda



es rehacerme
otra vez
la vida.